Un paseo por el corazón de Gaudí

Hace casi treinta años que vivo en el mismo sitio, a unos 20 minutos de Barcelona y todavía no habia visitado la Sagrada Familia, siempre lo iva dejando con la excusa de que estaba cerca...pues al fin, nos decidimos y vaya si valió la pena!!

Tengo que reconocer que no soy muy creyente, pero aún y así cuando viajo, y descubro una iglesia, un templo, una basilica...siempre entro, me gusta ver como son, que ambiente se respira dentro...y he de decir que hasta ahora, las iglesias de Roma eran las que más me habian gustado...hasta que descubrí lo bella, impresionante y bonita que es la Sagrada Familia de Barcelona, me cautivó desde que puse el pie dentro en el primer instante.

No se puede describir exactamente con palabras, es, simplemente cautivadora, desde los cristales de colores, hasta sus columnas, pasando por la impresionante puerta con el Padre Nuestro en 50 idiomas.

Antoni Gaudí, vivió con la naturaleza muy cerca suyo, desde bien pequeño y este ha sido su seña de identidad es casi todas sus obras, es por eso que en la construcción de la basílica quiso emular un enorme bosque, y lo consiguió.

La visita da para mucho, ya que no solo se puede visitar la basílica, debajo de ella están los talleres, el museo y la cripta del autor (se observa desde el museo pero no se puede bajar) y hay hasta otro templo debajo!

Además, tambien se puede subir a la torres, nosotros no lo hicimos porque hay un horario y no nos venia bien.

Hay entradas desde 14 euros, que es la normal, hasta mucho más, añadiendo guia, audioguía, visita a las torres...nosotros cogimos la sencilla, ya que dentro en cada punto hay paneles para leer y la verdad es que estuvieron bien gastados.